Editoriales Yorubas

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domingo, 31 de enero de 2010

Abúléko.Editorial #4. Òrìsà (Oricha, Orisha), Tutelar (Alagbatori), o Ángel de la guarda.

Abúléko.

Editorial #4

Òrìsà (Oricha, Orisha), Tutelar (Alagbatori), o Ángel de la Guarda.

Generalmente, hablamos de práctica espiritual como algo que está en nuestro imaginario y que comprende algún tipo de método, o sentarse en una posición a recitar un rezo específico de la práctica Yorùbá. Probablemente así sea, pero en lo que a la gente común y corriente entre las que me incluyo, les es útil, la practica espiritual se realiza en todo acto de amor. Ejecutar acciones correctas, nobles y desinteresadas, son excelentes y necesarias prácticas espirituales.

Nos hemos referido a ciertos seres que señalamos como las divinidades u Òrìsàs, los reconocemos como Òrìsàs tutelares. Éstos, según la creencia Yorùbá, es la voluntad al servicio de Olódùmáré (Dios en la creación y la representación de gobierno teocrático en el mundo Yorùbá).

El tema que vengo a plantear y del cual debemos ocuparnos en este escrito es delicado, y lo es por los 500 años de creencia de vida afrodecendente de la Ocha/Ifá americana. El tema en si es perenne, ya que pertenece y viene aunado a la misma existencia del hombre y su desenvolvimiento en el mundo que, en el mejor o peor de los casos, él pueda solamente ver el lado oscuro, mayormente, quiero indicar con esto que es raro cuando se ve como en un espejo, mientras que permanece en una esfera construida por el mismo.

Comencemos por hacer notar que mientras en América la palabra Ocha significa ¨Deidad ¨, la palabra ¨Òrìsਠtiene un significado más amplio y que nos muestra una realidad muy distante.

Si descomponemos la palabra Òrìsà en su elisión nos encontramos con que: Ò = la, rì = Cabeza, sà = Selecta, tenemos que la palabra bajo estudio significa: LA CABEZA SELECTA.

Lo que nos indica que Òrìsà es una cabeza escogida, en este caso escogida por Olódùmáré para una función específica, por eso en Yorùbá Afro-Americana se les menciona también como los Ministros de Olódùmáré.

En la cosmogonía Yorùbá encontramos que cada divinidad tiene algo que ver con los elementos de la naturaleza.

Òrìsà como fuerza en la naturaleza, son las características elevadas de Olódùmáré repartidas en forma individual o separada, para un mejor entendimiento y manejo para cada uno de nosotros. La energía Òrìsà cuida y se presenta desde Ori, hasta la parte física dentro del plano espiritual/físico, con la debida identificación y el vivir en armonía con la naturaleza.

Así es el Òrìsà, y nuestra conexión con el debe ser igual, constante, diaria, de esa manera nuestra conducta cambiara igualmente diariamente, lograremos esa armonía.

Esa conexión con el Òrìsà tutelar nos dará la enseñanza que va dirigida a conseguir y buscar lo bueno de la vida, el AMUWON o ser personas equilibradas.

Cada ser humano, contiene la energía de Òrìsà dentro de sí, lo que hace que cada ser humano sea "Hijo" de determinado Òrìsà. Al hacer ceremonias consagratorias hacia su Òrìsà Tutelar, se convierte en Awò Òrìsà (Seguidor de Òrìsà), o sea su sacerdote.


El enfoque en común, que es dado la alineación con las energías de la naturaleza (Los Òrìsà) y con el destino predeterminado de cada quien. Allí hace presencia la del designio de Ifá por mediante del oráculo de Ifá y sus Odù. Por eso es recomendable que el Neófito sea llevado a la casa de Òrúnmìlà para que sea notificado si destino en la tierra y el òrìsà que le corresponde en su paso por la tierra (Aiye).

Òrìsà es parte fundamental de la naturaleza, ya que Òrìsà se vuelve más que un elemento y una divinidad, parte de la esencia humana al interferir de un modo o de otro en la personalidad humana, ya que las divinidades se vuelven arquetípicas desde que la energía de Òrìsà se integra a los humanos. Cuando una persona contiene particularmente mayor energía de un Òrìsà determinado, se dice que es Omo Òrìsà (Hijo de Òrìsà), pronunciando que una persona devota o no, contiene mayormente la energía de un Òrìsà en particular.

En la práctica Yorùbá Afrocubana o Latinoamericana, como ya se menciono anteriormente, los Òrìsà tienen personalidades arquetipo que son influencia en los hombres, como la personalidad del azar de Èsú (Elégbàra) o el apasionamiento de Sango, la fortaleza de Ògún, motivo que genera la confusión sobre quién es el Òrìsà tutelar de algunos iniciados, mas sin embargo, es importante entender que todas las energías de Òrìsà se encuentran en nuestra identidad, ya que todos concentramos fuerza física, parte de Ògún, que además es el encargado de crear la estructura ósea, todos somos pasionales, aunque en distinta medida, pero esta es parte de la naturaleza del Òrìsà Sango, todos sentimos amor, cosa que la Òrìsà Òsún posee, ya que es la divinidad del Amor y los Ríos, en fin, al tratar de enumerar a todos los Òrìsà y sus personalidades arquetípicas seria una lectura sin fin, mas sin embargo debemos de recordar que Òrìsà se encuentra en todos los elementos de la tierra y sobre todo en nuestros cuerpos, cosa que al estar consientes de ello nos acerca más a hacer una práctica mas real y mas intrínseca con los Òrìsà.

La enseñanza Òrìsà nos manifiesta una Moral dual, que nos lleva a discernir sobre la vida que debemos llevar, que tendrá un inexorable efecto en las acciones, en la calidad de vida, las relaciones en nuestro entorno y en el futuro de aquellos que vienen detrás de cada uno de nosotros, por eso debemos vigilar el libre albedrío. ¨Actuamos bien, nos irá bien¨ es mucho lo que el Òrìsà debe enseñarnos, y todo lo que nos enseña es bueno.

El Òrìsà es una energía la cual hay que comprender, y esa comprensión viene a través del estudio constante, del amor y la práctica.

Iré O

Director de la Revista.

Douglas Cárdenas.

Fálérí Fálérè Ọdúbèlà.

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